A mi padre. In Memoriam.
La obra Rice meals del alemán Wolfgang
Laib (Metzinger 1952) es una línea de 33 platos de latón con montoncitos de
arroz en cada uno que realizó después de un viaje por Oriente. El autor, aunque
cursó estudios de medicina, lleva dedicándose al arte desde los años
setenta. En el 2007 el museo Reina Sofía
realizó una exposición con piezas representativas de su trayectoria creativa.
Este artista, perteneciente a una familia que viajaba con frecuencia a la
India, se interesó desde joven por la religión y el misticismo, encontrando en
el arte un medio para expresar su visión del mundo. Trabaja con materiales poco
comunes, como la cera de abejas, la leche, el polen o el arroz y sus obras
tienen un carácter de ritual (montaje muy meticuloso o mantenimiento diario,
por citar algún ejemplo) con una fuerte carga espiritual heredera de la
filosofía y de la religión oriental.
La pieza exhibía sencillez, pero
emanaba fuerza explicativa. El arroz es el alimento esencial en países
orientales, donde se come en esos sencillos platillos de latón, pero además
constituye una ofrenda común que los peregrinos dejan en los templos. Me
cautivó de inmediato y decidí emplearla para mis fines didácticos. Durante dos
cursos académicos fue la imagen que abría la lección correspondiente al sector
agrario español. Hoy, traigo aquí, condensados, algunos argumentos que los
alumnos iban desarrollando a partir de elementos o características de la pieza (Debo
advertir que ya llevábamos varias semanas de clase y la sorpresa inicial por
emplear obras de arte había pasado; únicamente los alumnos rezagados mostraban
extrañeza).
·
La agricultura es la encargada de ofrecer
alimentos a la población (arroz). La relevancia de la agricultura en el
desarrollo de los pueblos es incuestionable. El profesor Carlo Cipolla afirmaba
en los años setenta que en la historia del hombre han existido dos grandes
revoluciones: la Revolución Neolítica y la Revolución Industrial. La primera, iniciada
unos 8000 años antes de Cristo en Mesopotamia y China, fue de carácter agrario. El hombre abandonó
el nomadismo y en asentamientos permanentes inició la práctica de la
agricultura y de la ganadería. La agricultura fue el sector más relevante de la
totalidad de las sociedades hasta mediados del siglo dieciocho cuando, con la
denominada Revolución Industrial, la industria se convierte en la rama
económica dominante; proceso que se da primero en Inglaterra y luego en otros
países.
· El peso decreciente de la agricultura en el
sistema económico (perspectiva visual: empequeñecimiento). A medida que
las estructuras económicas de un país evolucionan la agricultura pierde importancia. Por ejemplo en España en
el año 1970 más del 30 por ciento del empleo estaba en las ramas agrarias; en
el último año esta cifra no llega al 5 por ciento. Idéntica tendencia se
observa en la generación de PIB (producto interior bruto. Indicador aproximado
de la capacidad económica de un país).
·
La agricultura moderna y el sistema tradicional
(producto único y consumo masivo de arroz en países menos
desarrollados). Una agricultura tradicional ofrece escasa diversidad de
productos y la demanda va dirigida, esencialmente, a la satisfacción de las
necesidades básicas. Los últimos datos del mercado mundial de arroz revelan que
en Asia (esencialmente China e India) se produce el 50 por 100 y se consume el 90 por 100 del total. En los países desarrollados,
a medida que aumenta el nivel de renta,
el consumo de productos agrarios se va sofisticando y crece la diversidad de
productos que llega al mercado. La modernización del sector agrario en España,
aunque todavía inacabada, es ilustrativa en
este sentido. Por un lado, los españoles buscamos cada vez más artículos
de origen agrario (variedades de frutas, verduras, carnes…) y se está
consolidando un segmento de mercado que desea productos de mayor calidad,
especialmente los de origen biológico. Para ello, los productores agrarios
deben adaptarse a estos nuevos gustos y ampliar la variedad de productos
cultivados.
·
El papel de la productividad (reiteración del objeto). El empleo de
nuevas tecnologías en el sector, bien sean mecánicas (tractores…) o químicas
(abonos…) ha supuesto un aumento de las producciones agrarias destinadas no
sólo al mercado interno sino a los mercados internacionales, esencialmente los
países europeos. En España desde el año 1985 la productividad del sector se ha
triplicado como consecuencia de la mayor utilización de tecnologías mecánicas.
Como consecuencia de este proceso, la oferta agraria se va especializando y, en
estos momentos, España tiene ventajas notables en algunas producciones, como
frutas, cítricos, hortalizas…, pero necesita importar otros artículos, por
ejemplo cereales. Por todo ello, los mercados internacionales resultan
imprescindibles para la agricultura española.
·
Interconexión con el resto de los sectores
económicos (los platillos conteniendo el arroz, el servicio asociado al
transporte, seguros para la exposición …). La agricultura es demandante de
productos procedentes de la industria (abonos, maquinaria…) y de los servicios
(bancarios, aseguradoras…). Una agricultura eficiente y productiva es un
impulso para el resto de los sectores. Y, por lo tanto, el sector agrario ha
sido pilar central en el desarrollo y crecimiento de las economías. Uno de los
problemas en los países atrasados es la baja productividad de la agricultura
por cuanto dificulta que se generen las rentas necesarias para demandar
productos industriales o servicios, careciendo de capacidad de arrastre para el
resto de los sectores.
No quiero extender mucho esta entrada
(hoy con aire de aula), aunque habiendo tenido la suerte de experimentar la
dinámica generada en una clase cuando el potencial de los alumnos se pone en
marcha, dejo dos notas añadidas. El trabajo creativo del artista era el
hilo conductor para reflexionar sobre los retos de futuro del sector agrario en
España (la nueva política agraria común, los desafíos ante la competencia de
terceros países…), o la humildad del objeto identificada con la escasa
repercusión mediática de la agricultura en España.
En suma, la agricultura es la
encargada de ofrecer los alimentos a la población; función que se hace menos
imprescindible a medida que los medios de transporte y comunicación son más
baratos y reducen los costes de abastecimiento desde lugares lejanos. Sin
embargo, cada día se hace más hincapié en la necesidad de una proximidad de la
producción de alimentos al mercado, entre otras razones, para aumentar la
calidad del producto que llega al consumidor sin necesidad de sufrir las
alteraciones provocadas por viajes de miles de kilómetros; filosofía que
subyace en el movimiento Slow Food. Por
eso me sumo al lema adoptado por la cooperativa de agricultores y ganaderos de
Guadalajara: “Sin agricultura y sin ganadería, nada”.
qué contenta estoy de haberme matriculado en este curso, estoy aprendiendo un montón de cosas y encima la matrícula me ha salido gratis. gracias profe!
ResponderEliminarQué bien¡¡¡ Por favor, no abandones la clase. Como alumna aplicada no olvides hacerme críticas. Pretender enseñar no está en mis objetivos, pero sí el de no aburrir a mis amigos.
EliminarLa agricultura es un excelente ejemplo de en lo que nos hemos convertido. Transformamos algo atávico y básico en algo tecnificado sin mano de obra humana que cada día nos alimenta menos y peor. Tenemos que volver a los orígenes para recuperar sabor, sentido y sostenibilidad. Pero no sé si ya hay vuelta atrás, y eso que nos va la vida en ello. ..
ResponderEliminarLa agricultura es un excelente ejemplo de en lo que nos hemos convertido. Transformamos algo atávico y básico en algo tecnificado sin mano de obra humana que cada día nos alimenta menos y peor. Tenemos que volver a los orígenes para recuperar sabor, sentido y sostenibilidad. Pero no sé si ya hay vuelta atrás, y eso que nos va la vida en ello. ..
ResponderEliminarLos últimos cálculos de la OMS parecen darte la razón: 582 millones de personas enferman cada año en el mundo por problemas relacionadas con la comida. La cifra es alarmante y la situación empeora en los países pobres. La contaminación alimentaria existe (abusivo empleo de antibióticos en la alimentación ganadera...), pero la solución no es la vuelta al sistema antiguo con abundante empleo de mano de obra y escasa tecnología. En mi opinión, en el marco de una agricultura modernizada hay que apostar por la calidad y no por la cantidad, recuperando, como tú dices, los criterios de sostenibilidad y buenos productos.
ResponderEliminarEl debate es muy interesante. Habría que hablar de los actores involucrados (productores, comercializadores, clientes... empresas proveedoras..).
Gracias Romi. Tu comentario suscita aspectos cruciales para la agricultura de hoy, tanto en países avanzados como en las economías más rezagadas.